Cuando se acerca la
Semana santa, los sentimientos cofrades y “el gusanillo” del
costal, le hacen al más pintado revivir sus sueños semana santeros. Si a eso se
le añaden las tertulias cofrades en las casas de hermandad, los programas
radiofónicos sobre las cofradías, los
ensayos de las distintas cuadrillas de costaleros, entonces se crea uno un
ambiente idílico que le hace subir a una nube, de la que no se bajara hasta
mucho tiempo después del Domingo de Resurrección.
Quiero con este sencillo artículo ayudar y animar a los costaleros
que se vayan fajando y que piensen solamente en lo que van a hacer por
devoción, y se olviden de una vez por todas, que el costalero es de corazón o
nunca será costalero.
El titulo no se si me ha salido acorde con lo que celebramos
este año y estamos preparando con ilusión, con corazón y con profesionalidad. A
primera vista el titulo parece poco claro y ambiguo, pero si lo piensa uno fríamente,
puede encontrarle sentido. A cada uno
le va la vida, según el cristal con el que se mira, el artículo tiene dos
formas de enfocarlo, según sean costaleros o cofrades.
El costalero al contemplar el Trono como una obra de arte, de
puro estilo sevillano y que dará mucho que hablar en los mentideros cofrades.
Para la pequeña historia quedara quienes fueron los que hicieron la “primera
levanta” y quienes formaron la cuadrilla histórica del año 2013, en la que se
estreno un Nuevo Trono de gloria en Pozoblanco. Todo como muy bonito, externo y
servirá para colgarse una medalla cada persona y para la cofradía, un hito en
su palmarés de objetivos cumplidos.
Existen también otros cofrades que a lo mejor les impulsen
más los sentimientos y miren hacia la nueva Imagen y se entrecrucen las miradas
y aparezca la sonrisa, la bondad, la cercanía y la Belleza de cara y manos de
JESÚS EN SU ENTRADA TRIUNFAL EN JERUSALEN y a alguien se le ocurra exclamar:
¡AHÍ LO TENÉIS!
· Jesús llega a Pozoblanco como “Rey” y
“Señor” y desea entrar triunfalmente por las calles abarrotadas de gentes que
expectantes miran a la nueva Imagen, en el precioso Trono que le sirve de
pedestal.
· Jesús se siente “cómodo y a gusto” en
medio de toda su cofradía, que orgullosa presenta al que “viene en el nombre
del Señor”
· Jesús se deja “querer” por la
“inocencia, sencillez y algarabía” de tantos “borriquitos y hebreas” que lo
acompañan, formando parte del mejor cortejo de Semana Santa, con la alegría y candor de sus palmas y
olivos ondeando al viento y gritando “bendito
el que viene. Hosanna al Hijo de David”.
· De la boca de los niños de pecho Señor,
has sacado tu alabanza, cuando en medio del desfile se oye un griterío:
QUEREMOS SEÑOR, QUE ENTRES EN NUESTROS CORAZONES”
· Que el rumor de las palmas y olivos
se convierta en oración y suba como incienso a tu presencia, Señor.
· Que el alzar de las manos inocentes
de los niños, sea el mejor testimonio que se oiga en la tarde del Domingo de
Ramos.
· Día y noche te bendeciré Señor,
cuando al cerrar los ojos cansados por el sueño, del corazón de un “borriquito
o Hebrea” salga este suspiro: gracias Señor por haberte conocido.
· Qué buena cofradía seriamos, si miráramos
antes a Jesús, que al paso de misterio que llevamos sobre nuestros hombros.
· Qué buena cofradía seriamos, Señor, si aprendiéramos que alrededor tuyo solo se
aprende: la unión, el amor, el perdón, el
servicio, la amistad y el trabajo en equipo.
· Qué magnífico desfile procesional
seria el del Domingo de Ramos, si todos viviéramos el grito y el sueño que a
todos nos une: JESÚS “QUEREMOS QUE ENTRES EN NUESTROS CORAZONES”
Con mis mejores
deseos de un solemne y festivo desfile procesional, en el Domingo de Ramos,
recibid mi enhorabuena, porque Jesús en
su Entrada Triunfal, ya está en medio de nosotros.
Vuestro amigo y consiliario
Antonio Rides
